Albóndigas de pollo con salsa de zanahoria y manzana
noviembre 04, 2016
Qué sensación cuando de la cocina salen olores que nos transportan, aromas que nos recuerdan momentos compartidos alrededor de la mesa, comidas familiares que se alargan hasta bien entrada la tarde, domingos todos juntos, rodeados de ese calor de hogar... Hace unos días preparamos esta receta que hoy os mostramos, uno de esos platos muy de mamá, cocinados a fuego lento, con calma, sin prisa. Y no sólo es especial por eso, sino también porque forma parte de nuestra primera colaboración con Menuari, un proyecto que nace de la mano de Bet, a raíz de su propósito de comer mejor y ayudar a otras familias a hacer lo mismo.
Al no encontrar un método que le funcionase para cumplir con ese objetivo a diario, dío forma - junto a su equipo - a un sistema sencillo, basado en la dieta mediterránea y de lo más divertido y atractivo para hacer partícipes a los más pequeños de la casa en algo tan importante como es seguir una alimentación saludable y equilibrada. Menuari es un espacio que busca facilitar la planificación de las comidas y el proceso de hacer la compra en el hogar, por lo que está en total sintonía no sólo con todo aquello en lo que creemos sino también con nuestro menú semanal, aquél que compartíamos hace unas semanas. Por todo ésto, no dudamos un segundo en colaborar y poner nuestro granito de arena para que siga creciendo.
Esta receta de albóndigas de pollo con salsa de zanahoria y manzana es nuestra primera aportación para su blog, por lo que también podréis encontrarla allí (tanto en catalán como en castellano) junto a muchas otras que han realizado en colaboración con la Fundación Alícia y el apoyo del Hospital Sant Joan de Déu (Barcelona).
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Albóndigas de pollo con salsa de zanahoria y manzana
Albóndigas de pollo con salsa de zanahoria y manzana
ingredientes
(para 6 personas aprox.)- 1kg de carne picada de pechuga de pollo
- 2 huevos L
- Pan rallado
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen
- Ajo y perejil al gusto
- Pimienta al gusto
- 1 pizca de sal
Para la salsa:
- 1 cebolla grande
- 2 zanahorias medianas o 1 grande
- 1 manzana
- 1 diente de ajo
- 1/2 vasito de vino blanco
- Sal al gusto
instrucciones
Para preparar las albóndigas:
Colocamos la carne picada de pollo en un bol grande. Añadimos los huevos, el aceite de oliva, el ajo y perejil, la pimienta y la sal. Mezclamos y añadimos el pan rallado a pequeñas tandas, hasta que la masa se pueda trabajar bien y nos permita dar forma a nuestras albóndigas. Si nos ponemos un poco de aceite sobre las palmas de tus manos, la masa no se nos pegará tanto y la podremos trabajar de manera mucho más cómoda. Una vez preparadas, las freímos en una paella con un poco de aceite a temperatura media-alta hasta que se doren y las reservamos en una cazuela. Desechamos una parte del aceite que hemos usado para freír las albóndigas (es importante evitar, en la medida de lo posible, verterlo en el fregadero, ya que el aceite vegetal usado es un gran contaminante del agua) y aprovechamos el resto como base para preparar la salsa.
Para preparar la salsa:
En la misma paella, con el aceite que hemos reservado, sofreímos la cebolla y el ajo, previamente rallados. A continuación, añadimos la zanahoria y la manzana (también ralladas). Cuando estén bien hechas, vertemos medio vasito de vino blanco. Dejamos que rehogue hasta que se evapore y añadimos un poco de agua. Salamos y dejamos que nuestra salsa haga "chup chup" durante unos minutos más. Una vez esté lista, retiramos del fuego y la trituramos lo más fina posible con una batidora de mano o procesador de alimentos. Rectificamos de agua si vemos que ha quedado demasiado espesa y la vertemos sobre las albóndigas que habíamos reservado en la cazuela. Dejamos reposar a fuego medio-bajo durante unos 30 minutos y ya estarán a punto para ser servidas.
Colocamos la carne picada de pollo en un bol grande. Añadimos los huevos, el aceite de oliva, el ajo y perejil, la pimienta y la sal. Mezclamos y añadimos el pan rallado a pequeñas tandas, hasta que la masa se pueda trabajar bien y nos permita dar forma a nuestras albóndigas. Si nos ponemos un poco de aceite sobre las palmas de tus manos, la masa no se nos pegará tanto y la podremos trabajar de manera mucho más cómoda. Una vez preparadas, las freímos en una paella con un poco de aceite a temperatura media-alta hasta que se doren y las reservamos en una cazuela. Desechamos una parte del aceite que hemos usado para freír las albóndigas (es importante evitar, en la medida de lo posible, verterlo en el fregadero, ya que el aceite vegetal usado es un gran contaminante del agua) y aprovechamos el resto como base para preparar la salsa.
Para preparar la salsa:
En la misma paella, con el aceite que hemos reservado, sofreímos la cebolla y el ajo, previamente rallados. A continuación, añadimos la zanahoria y la manzana (también ralladas). Cuando estén bien hechas, vertemos medio vasito de vino blanco. Dejamos que rehogue hasta que se evapore y añadimos un poco de agua. Salamos y dejamos que nuestra salsa haga "chup chup" durante unos minutos más. Una vez esté lista, retiramos del fuego y la trituramos lo más fina posible con una batidora de mano o procesador de alimentos. Rectificamos de agua si vemos que ha quedado demasiado espesa y la vertemos sobre las albóndigas que habíamos reservado en la cazuela. Dejamos reposar a fuego medio-bajo durante unos 30 minutos y ya estarán a punto para ser servidas.
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